jueves

Balance

Las semanas de las fiestas me ponen más melancolica que lo normal. Recordar a los que no están (y extraño tanto), a los que por decision propia no quieren estar, a los que están lejos, es común y no la mejor idea. Uno se pone triste y se acuerda del pasado y, casi siempre, de lo negativo.
Paso navidad y este año fue diferente. La cena fue distinta (aunque la comida es siempre la misma), las risas eran más genuinas, estábamos más relajados. Puede que haya sido el alcohol, pero estábamos más felices. Ya uno va aceptando que los que no están fisicamente, están en cada sonrisa que nos dedicamos, en cada risa, en cada gesto de amor, y eso tranquiliza.
Hace unos días vengo haciendo "el balance del año". Ese tan temido balance.
Este año tuvo de todo. Lo que puedo asegurar es que me hizo crecer de golpe. Muchas veces me cai, pero me supe levantar y aca estoy. Todavía sigo medio magullada pero se que todo pasa.
Lo que agradezco a la vida es que me haya mostrado que el amor de verdad existe. Todos los días me levanto al lado del hombre que mas amo en este mundo, el que me levanta cuando me caigo, el que me enseña a caminar en esta etapa difícil, el que me guia, el que me reta, el que me muestra que todo se logra con esfuerzo y dedicacion.
Es el hombre el cual me tiene loca, el cual me hace temblar, el que me devolvio el corazón, la confianza, las ganas de soñar y vivir. El me salvo la vida y me la salva todos los días.
Si el esta al lado mio, el balance siempre da positivo.